El voleibol como taller es fundamental para el desarrollo físico, social y emocional de las estudiantes. Este deporte fomenta la actividad física regular, mejorando la salud cardiovascular, la coordinación y la agilidad. Además, el voleibol enseña valores importantes como el trabajo en equipo, la comunicación efectiva y el liderazgo, ya que requiere colaboración y estrategias compartidas para lograr objetivos comunes. Participar en este taller también puede aumentar la autoestima y la confianza de las estudiantes, al ofrecerles oportunidades para establecer metas y superarse continuamente. Asimismo, el voleibol promueve el respeto y la disciplina, ya que las reglas del juego y la interacción con compañeras y adversarias desarrollan un sentido de fair play y ética deportiva. En resumen, el taller de voleibol contribuye de manera integral al desarrollo personal y social de las estudiantes, enriqueciendo su experiencia educativa.